Es un hecho que La Salle juega mejor cuando se enfrenta a los equipos de arriba, y también es un hecho que los colegiados con la ayuda de sus asistentes desvirtúan el juego y el espectáculo porque eso era lo que realmente estábamos viendo en el Virgen del Carmen hasta el minuto veinte.
El juego y el espectáculo lo ponía La Salle, en el m.2 avisaba Diego, y a renglón seguido en el m.5 Nico dispara a puerta y tras el rechace del portero Cuenca libre de marca, marca (valga la redundancia) a puerta vacía el 1-0.
Los siguientes minutos fueron un recital de fútbol de La salle, los visitantes bastante tenían con aguantar el empuje que estaban imprimiendo los jugadores lasallistas, pero todo se desmorona en el m.24 cuando el colegiado da por válido un gol inexistente después de que saliese el balón por encima del marco de Rubén y el viento lo vuelve, tras botar en el suelo se introduce en la portería. Provocando numerosas protestas y alterando los ánimos tanto del público asistente como de los jugadores.
A raíz de ese momento se vio otro partido muy distinto y para agravar la situación en el m.32 llegaba el 1-2 de un saque de esquina inexistente, ya que el balón no salió por la linea de fondo.
En el m.37 llegó el 1-3, en el m.59 el árbitro no ve un derribo a Nico dentro del área y en el m.89 el 1-4 definitivo.
En definitiva, lo que pudo haber sido un espectáculo pasó a ser una derrota, triste derrota. El trio arbitral se cargó el juego de La Salle y sacó lo peor del equipo acabando con un expulsado y cargado de tarjetas.
Cuenca corre para celebrar el primer y único tanto de La Salle.Algunas muestras del acoso de La Salle sobre el área rival en sus momentos más electrizantes de la primera mitad:
A pesar de ir perdiendo nunca bajaron los brazos.
Capi pasando un balón de tacón.
